“No le importa lo que piense la sociedad”
No es posible -por muy distanciada que Maerker haya estado de México durante la época del insomne Salinas al frente de los desatinos de la República del Mariachi- que la entrevistadora haya siquiera imaginado que "el pelón" -sin albur- fuese a constestarle todas sus preguntas. Esa fue una conducta muy "inocente" de su parte. Si creíba que iba a invocar a todos los poderes del bien, y ella, que supuestamente es un símbolo de los "nuevos aigres" en México iba a conseguir una respuesta directa de Salinas de Gortari, pecó de comunicadora en pos de la verdad y la justicia (léase también esta expresión como: Este es un trabajo para Supermán y el salón de la Justicia) y debió protegerse así misma con varios amuletos como "el ojo de venado" o simplemente poniendo una pequeña sávila amarrada con un listón rojo a la entrada del estudio u otras más.
Este México necesita otras cosas a parte de tratar de hacer comparecer ante la opinión pública al consabido -un secreto a voces no es suficiente- asesino de Colosio y Ruiz Massieu -otro par de corruptos y matones-, al oponente por antonomasia del grupo de Atlacomulco -lidereado en ese entonces por el Capo di tutti capo, el Profesor Hank González.
Este México necesita concentrarse de veras en hacer justicia a toda costa o dejar para el olvido las ofensas cometidas y concentrarse pragmáticamente en el presente y futuro, para evitar que porquerías bípedas como Salinas se atrevan siquiera -y de nuevo- a asomar sus inmundas cabezas fuera del hoyo.
México
Ciudad de México
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