MEXICO CITY, June 11 - There was not much that Guadalupe Ávila Jiménez liked about her factory job making children's costumes, including flowing Barbie gowns for little girls who like to play princess.
No es extraño encontrar este tipo de abusos contra mexicanos. Los propios supervisores de la empresa, no hablemos de gente de origen extranjero, sino connacionales, son los ejecutores de acciones tan éstupidas como innecesarias. Es obvio que la falta de dinero es suficiente en muchos casos para obligar a las personas a extender sus horas habituales de trabajo más allá del límite de las 8 hrs. Lo del papel del baño, no le asombra a nadie, es decir, si el gobierno de este país pudiera hacerlo de la misma forma, lo haría sin dudarlo siquiera. Nadie se quejaría. A parte, si los extranjeros lo hacen en su país ¿Qué o quién se los habría de impedir en territorio mexicano?
Por otro lado, ahora es casi seguro que los trabajadores despedidos quisieran nunca haberse quejado por las condiciones bajo las que se desempeñaban. ¡Es tan difícil encontra empleo estos días! ¡Y nadie le regalará un peso! Además, si logran ganar en sus demandas de todas formas es seguro que se quedarán sin chamba. O bien, no los vuelven a contratar nunca ó Mattel cambia todas sus operaciones a China.
Sí, hay que cuidarse de posibles abusos de las compañías, pero ¿Qué es más importante? ¿La papa o la dignidad? En un país donde todo, absolutamente todo escasea, sólo se puede luchar por las dos al mismo tiempo y asumir las consecuencias, cualesquiera que éstas sean.
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