Actualización 2.0

Esta nota la escribí el 22 de agosto de 2007, pero me pareció que valía la pena ponerla por aquí, esto a la luz de los eventos recientes y por el apoyo que los partidos de todas las corrientes mostraron en favor de la llamada Reforma Electoral.

Después de perder la poca o casi nula credibilidad (y que se había cosechado a costa de un inmenso trabajo, una enorme partida del presupuesto oficial de varios sexenios, continuas y repetitivas campañas publicitarias, coerción del gobierno para adquirir una identificación válida, sacrificio y miles de horas hombre) ante millones de mexicanos y debido en su gran mayoría a asuntos de las más diversa índole, todos surgidos desde la clase política. Como aquel sistemático descrédito incitado mucho antes del 2006 por simpatizantes del PRD y por el mismísimo Gallo al cual sólo le quitaron una pluma -AMLO-, hasta esos otros que incluyen la relación: lindo escolapio en apuros vs. su mayestra hermosa y querida (versión oficial: Ugalde-Gordilllo).
¿Por qué ahora "le quieren volver a dorar a uno la pildorita"?, ¿Por qué ese torpe afán de fastidiar al prójimo?

Si ya no sirve para la maldita la cosa el Instituto Federal Electoral (IFE), y todas las fracciones parlamentarias lo avientan a diestra y siniestra en el palacio de San Lázaro ¿Para qué darle más recursos? ¿Si no tiene capacidades para efectiva, civil o penalmente castigar a los culpables -perdón, perdón, corrijo a continuación- aspirantes, candidatos y asociaciones delictuosas -ejem, perdón, me ofusqué nuevamente- políticas ¿Para qué carajos sirve?

Claro, aparte de justificar las partidas presupuestales del gobierno legítimo para que el IFE y toooda su caterva de funcionarios pueda llevar a cabo "su trabajo", eso además de procesar identificaciones oficiales que sólo se dedican a rastrear los movimientos de cada uno de los ciudadanos en territorio mexicano, y que únicamente se utilizan de manera práctica para cambiar cheques en el banco, ¿Para qué carajos sirve? ¿Para la legalidad de los comicios? ¿Para traer seguridad y confianza a los procesos electorales? ¿Para asegurar la equidad entre los candidatos y los partidos políticos?

Eso de la actualización 3.0 de la famosísima credencial de elector (citando un viejo spot: ¿Cuál foto? ¿Cuál camioneta?) provoca desfalcos, duplicación y venta a empresas privadas transnacionales el padrón electoral, produce en su conjunto una inmensidad de dudas al tele-sopapo-espectador, quien solamente quiere que lo dejen en paz de una buena vez, y pide a sus autoridades, lo mismo que éstas le exigen a él: certeza.

Sustituye IFE credenciales de elector
Ciudad de México (20 de agosto de 2007).- El IFE comenzará una campaña para sustituir millones de credenciales para votar que no han sido actualizadas.
Aquellas micas que en la parte de atrás tienen como último recuadro el "03", que actualmente son más de 21 millones, deberán ser renovadas con el fin de mantener vigente el padrón electoral.
Nota Completa, Vía: periódico Mural