Es necesario saber de antemano que todo lo que proponen actualmente TODOS los candidatos a la presidencia de la República, es un lugar común. Todos hablan de problemas conocidos por los mexicanos desde antaño. Sí, es necesario combatir la inseguridad en todas sus ramificaciones, sí es primordial disminuir la deuda externa, la deuda pública, la inflación, la devaluación de la moneda, la devaluación de los salarios, acrecentar la vigencia y respeto a los derechos humanos, a las libertades individuales -como la de expresión-, el cuidado del medioambiente, de los recursos naturales -incluida la preservación de los escasos mantos acuíferos que quedan sin contaminar-, la defensa de la soberanía nacional, la creación de empleos, la lucha contra la impunidad y la corrupción, impedir la evasión fiscal, la defensa de los derechos de nuestros connacionales en EU y el extranjero, el impulso al campo para acabar con el atraso "milenario" que sufren las personas dedicadas a este sector y demás e infinidad de etcéteras.
Sabemos a ciencia cierta las deficiencias que acosan a nuestro hermoso, pero atrofiado y vapuleado país. Sabemos la carencias, los peligros, los rezagos, las omisiones -como en el caso de los acuerdos de San Andrés Larraínzar entre las comunidades indígenas y el gobierno federal-, las acciones superficiales, futiles, de verdad conocemos todo esto. Y los suspirantes también están concientes de ello. Sus propuestas no se alejan mucho unas de otras, para ejemplo un botón -y aunque sea plagio- el seguro para las personas de la tercera edad que tanto AMLO como Fox implantaron, cada quien en su ámbito de acción. A la gente beneficiada -de manera práctica- no le importa si fue uno antes que el otro. Pero esto enmarca el hecho que todos sabemos de manera general que es lo verdaderamente indispensable para el bien de la nación. Y no hay muchas diferencias de apreciación entre un partido político y otro. Es decir este es un asunto de forma y no de fondo.
Mi humilde pregunta sería la siguiente:
¿Que Carajos tiene esto que ver
Sabemos a ciencia cierta las deficiencias que acosan a nuestro hermoso, pero atrofiado y vapuleado país. Sabemos la carencias, los peligros, los rezagos, las omisiones -como en el caso de los acuerdos de San Andrés Larraínzar entre las comunidades indígenas y el gobierno federal-, las acciones superficiales, futiles, de verdad conocemos todo esto. Y los suspirantes también están concientes de ello. Sus propuestas no se alejan mucho unas de otras, para ejemplo un botón -y aunque sea plagio- el seguro para las personas de la tercera edad que tanto AMLO como Fox implantaron, cada quien en su ámbito de acción. A la gente beneficiada -de manera práctica- no le importa si fue uno antes que el otro. Pero esto enmarca el hecho que todos sabemos de manera general que es lo verdaderamente indispensable para el bien de la nación. Y no hay muchas diferencias de apreciación entre un partido político y otro. Es decir este es un asunto de forma y no de fondo.
Mi humilde pregunta sería la siguiente:
¿Que Carajos tiene esto que ver
el próximo presidente de la república, vivirá y despachará en el Palacio
Nacional. Los Pinos van a pasar a formar parte del Bosque de Chapultepec, además
en los Pinos hay muy malas vibras que con ninguna rameada, ni con una limpia se
van a poder quitar.(Extracto del discurso de Andrés Manuel López Obrador en el DF el 26 de febrero de 2006)
con el desarrollo sostenido y armónico de México? ¿En qué nos va a beneficiar que el presidente despache en uno u otro lugar? ¿Y la "rameada" va a ignaugurar una nueva visión para hacer política?
Creo que es intrascedente y el reacondicionamiento, generará gastos inmensos, sin duda, por muy pequeños que sean.
Lo realmente molesto es esa inche... o..sesión,
-¿Qué dijo?
-(Pinche Obsesión)
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