Definitivamente las propuestas de los gobiernos local y federal dejan mucho que desear. ¿Se ha puesto usted a pensar sobre los "changarros" ó sobre el nuevo tipo de vivienda impulsada por la presidencia; sobre la construcción del Segundo Piso de Periférico, el seguro social gratuito, los "bonos especiales" implementados por el Gobierno del Distrito Federal (GDF) para favorecer a "ancianos" y madres solteras? ¿No todos estos programas atentan contra el bolsillo de los contribuyentes? ¿No todos son populistas y en realidad no remedian ninguno de los problemas que realmente aquejan a nuestra nación? Por un lado, el estado imparte justicia de manera desigual. Por otro, el GDF desacata una orden por las razones equivocadas. ¿Por qué equivocadas? Preguntará su mercé, con justificada razón.
Pues son erróneas desde el principio. Todo empezó con los dimes y diretes entre Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y el "jefito" Diego Fernández de Cevallos. Este asunto "político a todas luces", contravino a intereses creados por ambos bandos. Es por todos sabido que Cevallos en más de una ocasión ha victimado al país, al litigar en asuntos contra intereses oficiales en México. Sin embargo ¿No es acaso un excelente litigante? Es difícil ganarle un asunto en tribunales. En fin.
Bueno, por su parte, AMLO ha polarizado negativamente a nuestra sociedad en más de una oportunidad. En Tabasco, pozos y localidades estuvieron bajo su control, después que el PRI olímpicamente "le pinto cremas" (algo sucio en verdad) por la gobernatura de esa entidad, la cual pasó por "derecho de partido" a manos de Roberto Madrazo Pintado. Por eso sacó a la luz su primer libro, en el cual emarcaba el desarrollo de la "verdadera democracia". ¡Que caray!
Para continuar, ninguno de los antes citados inició sus operaciones en el multicitado predio, en favor de la humanidad. Eso: "Que vayan y se lo cuenten al Güama". Que si el predio vino, fue, regresó, los límites, el camino, etcétera, sólo son elementos jurídicos aprovechados por la rapiña de los dos bandos para lograr sus objetivos. En verdad, puras porquerías son las que hace la clase política del país.
Me sorprende como los "intelectuales", "libre pensadores" de esta nación señalan que sólo el pueblo tiene la capacidad de decidir en las urnas el destino de la nación. ¿Qué? ¿No esperan robo de votos, quema de urnas, coerción contra los ciudadanos pobres, ricos, asegurados, no asegurados, con vivienda, indigentes, burócratas o no? Es increíblemente sorpresiva su candidez ¿No se supone que algunos de ellos sufrieron persecusión bajo el antiguo -nunca muerto- régimen?
Las Razones para iniciar este debate nacional son equivocadas. Nadie de los involucrados directamente tiene la razón. Nadie de los antes citados está interesado realmente en el pueblo. Nadie de ellos está interesado en los recursos naturales del país, sino es para sacarles provecho económico "a corto plazo". Porque carajo son tan estúpidos que ni eso saben hacer, vender a su país. Lo hacen por tres pesos. La discusión debería centrarse en: ¿Qué nación quieres y cómo la conseguiremos? Deja a un lado utopías e imaginerías. Deja a un lado, la buena voluntad. Deja a un lado partidos políticos. Deja a un lado regionalismos. Atiende a las personas que te rodean. ¿Te has fijado en lo jodido que estamos todos? Estés lejos o cerca, aquí o en el extranjero ¿Te has fijado realmente lo afortunado que eres de poder leer esto? ¿Sabes cuántos no pueden hacerlo en México por su paupérrima condición económica?
Desafuero
Ciudad de México
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